3.10.2010

Encajonado y olvidado.

Sus botas bailaban al compás de los tambores, miraba a su al rededor como si estuviera en el paraíso, y con ojos de soñador veía el humo invadir su territorio. Volaba, soñaba despierto, y bailaba para olvidar. El humo no paraba de salir, y limitaba las luces danzantes. El seguía bailando indiferente, mientras todos lo aclamaban. Consumía y se consumía para bailar y bailar consumiendo sus consumos. "Cuando yo me muera haré una fiesta" dijo, y fue la ultima vez que escuché su voz. Le dijo algo al oído a un extraño y murió. El extraño salio a cumplir su encargo maldito, y con fanatismo mató al duende del rock. Se derritió entre sus dedos el revolver que disparó, el solo reclamaba un lugar en su corazón, pero al rato noto que dio su último latido. Triste y desconcertado, se quitó el alma del cuerpo, sin saber que terminaría encajonado y olvidado en un rincón de su ciudad amada.

1 comentario:

Joseto. dijo...

bieeeeeen ahora somos amigos de todo... dame una sorpresita mas... tienes tuiter? maispeis? jaja lastfm?